martes, 22 de febrero de 2011

Pienso, luego Oriento


Es habitual entre las personas que atendemos oír explicaciones varias sobre el por qué no encuentran empleo.  La idea de que otros ocupan nuestros puestos de trabajo inmerecidamente es habitual, y triste cuando el origen  es la raza o nacionalidad.
A las 9.00 oyes a Juan decir "sólo contratan a extranjeros" y a las 10.00  del mismo día te dice Khalil que "nada más que quieren a los que son de aquí".
Ante esta exposición de argumentos es evidente que, al menos, uno de los dos está en un error estadístico y de lógica pura. Aunque lo peor es el efecto de inmovilidad que produce esta idea irracional de sobre generalizar un hecho o situación a todas las demás con el consabido "para que voy a...si ya sé que...."
Desmontar estas ideas es parte del proceso de la Orientación Profesional. Difícil pero necesario.

Lo más complicado es cuando esas ideas, que nos condicionan, vienen del entorno y no exclusivamente de la persona que atendemos.
"Mi madre dice que sólo busque empleo de limpiadora porqué no me van a contratar de otra cosa" cuando quizás su madre sólo haya trabajado de limpiadora. O " mi novio me dijo que quitara eso del currículum", cuando igual su novio nunca ha hecho un CV. Hay un sin fin de recomendaciones bienintencionadas que curiosamente no suelen ser motivos de crecimiento, de empuje ni de motor de arranque hacía ese trabajo que queremos conseguir.

En la búsqueda de empleo tomar decisiones de manera adecuada e independiente implica, en ocasiones, cambiar de idea respecto a nuestros primeros planteamientos.
El facilitar este proceso puede ser sencillo o no. Depende entre, otros factores, de la dirección e intensidad con la que son influidas las personas que atendemos.

lunes, 14 de febrero de 2011

La libertad de elegir


 
¿Pueden todas las personas ser orientadas? A priori la respuesta sería si.
Pero ¿son susceptibles de ser orientadas todas las personas en todos los momentos de su vida? Aún cuando manifiestan su deseo de trabajar y su disponibilidad, hay situaciones en la vida de las personas en las que las palabras "planificar", "búsqueda activa" o "currículum vitae" no tienen ningún sentido.

Si el mes que viene te echan de casa, si comes de lo que recoges de la basura o si tus ingresos dependen exclusivamente de revender lo que otros tiran, vives con la sensación de tener poca o ninguna posibilidad de elegir. Así parece bastante complicado la acción de la Orientación Profesional, al menos en exclusiva.

 Principalmente se llega a estas situaciones por falta de planificación, por no marcar un objetivo ni estrategias para conseguirlo. Esto unido a la angustia de estar en situaciones de exclusión social hace que justo lo que es más idóneo empezar a trabajar con estas personas, sea lo que más alejado está de su realidad.

La coordinación con  los diferentes programas de las Administraciones Púlicas es imprescindible para normalizar una situación que nos acerque a la linea de salida.